Supelmelcado La Otla Patlia: Tragicomedia de una idiosincracia
Supelmelcado La Otla Patlia, obra escrita y dirigida por el tucumano Carlos María Alsina, parte de un hecho real –los violentos saqueos producidos en Tucumán en diciembre de 2013 durante una huelga policial– para invitarnos a reflexionar acerca de qué sociedad somos y qué sociedad queremos ser. ¿Es posible ser honesto en un mundo deshonesto? Es la pregunta que subyace.
Fotografía gentileza de Cristiana Zanetto
Atrincherados en su local, el Sr. y la Sra. Wang, una pareja de comerciantes coreanos, tratan de resistir, junto a sus empleados, a los salvajes robos producidos durante una huelga policial. Ella empuña una escopeta mientras su esposo pone en juego toda la sabiduría oriental para mantener la calma y no caer en la violencia y el desgobierno que impera. No faltan los oportunistas: algunos ladronzuelos de poca mota, un puntero político que promete acelerar las “ayudas” del gobierno a cambio de coimas, y el policía en huelga que ofrece protección “extraoficial” a cambio de dinero. Pero, también, aparecen personajes entrañables como la empleada del supermercado que está dispuesta a seguir trabajando para recuperar lo perdido -empezar de nuevo-, o el capitán Ututo, un precario héroe barrial que, con más corazón que superpoderes, intenta defender a los Wang.
La puesta conmueve y entretiene en la línea de un muy logrado grotesco que resulta sin dudas el estilo más acertado para comprender la complejidad del hombre actual. Alsina y su elenco logran equilibrar el efecto tragicómico esperable para que el público pueda asimilar lo terrible de los hechos que se cuentan, divertirse y verse interpelado por la propuesta de este espectáculo. Las notas de cierto color local y la innegable escenificación de buena parte de la idiosincrasia tucumana resultan un guiño para el público local, sin embargo, trascienden lo meramente costumbrista para fundirse con la sabiduría oriental en la que se ponen de manifiesto costados negativos y positivos de la condición humana toda. Así la obra alcanza ribetes universales.
El teatro, siempre atento a los vaivenes del sistema cultural, muestra en este caso la nueva multiculturalidad que diseña Tucumán: a las etnias más antiguas presentes en la provincia como son el elemento andino primero junto a las oleadas italianas, árabes y judías del siglo pasado, se suman hoy nuevas comunidades; tal el caso de la coreana.
El equipo tucumano responsable de Supelmelcado La Otla Patlia parece haber hecho suyas las ideas de Baudelaire cuando en Lo cómico y la caricatura propone: “La risa provocada por el grotesco tiene en sí misma algo de profundo, axiomático y primitivo, que se acerca mucho más a la vida inocente y a la alegría absoluta que la risa provocada por la comicidad de las costumbres”.
Entre las actuaciones correctas y efectivas, se destacan especialmente Alejandro Sandoval en la construcción de un logrado Sr. Wang y Virginia Cedamano como su esposa, la Sra. Wang.
Con esta nueva producción, el Teatro El Pulmón –inaugurado en 2002– renueva el compromiso con la militancia cultural que ha caracterizado desde siempre la actividad de Carlos María Alsina, autor, director, docente y actor para quién, como ha declarado en más de una oportunidad, “el teatro es una peligrosa arqueología del presente”.
Ficha técnico-artística
Dramaturgia: Carlos María Alsina
Elenco: Virginia Cedamano – Alejandro Sandoval – Lali Carhuavilca – Federico Cerisola – Milagro Mendía – Pablo Mellace – Daniel Hipólito Fernández – Golo Saifán -
Escenografía: Jorge Salvatierra
Vestuario: Alejandro Sandoval
Dirección: Carlos María Alsina
Funciones: Viernes y sábados 22 horas, domingos 21 horas. Teatro El Pulmón, Córdoba 86. San Miguel de Tucumán